Entendemos por desaparición forzada el hecho de la aprehensión de una persona por servidores públicos, su reclusión, ocultación y la negativa de las autoridades a reconocer cualquiera de los elementos anteriores. Esta práctica criminal ha sido uno de los más viejos abusos cometidos en el ejercicio del poder. Desafortunadamente nuestros gobernantes al tratar de construir su gran imperio en donde todos los colombianos deben regirse llanamente a los lineamientos dados por los mismos, en el afán de construir la gran fachada de “seguridad democrática” han dado muerte a todos aquellos que están en oposición al régimen, con esta fachada lo que han hecho es callar la voz, la crítica, la opinión de un pueblo que anhela una Colombia del pueblo y para el pueblo, esa gente que es la grieta en la pared, es esa gente que piensa como uno más del pueblo y no se rige a lo que muchos gobiernos han pretendido en Colombia y continuar con una ignorancia la cual en vez de progresar a un siglo 21 nos pretenden dejar en un pasado en donde la oscuridad, la desgracia , la represión nos lleva a tener una mente vana y un pueblo pobre en conocimiento, y expresión.
Si bien no ponemos a investigar en la fiscalía cuantos desaparecidos actualmente hay en Colombia y la profesión de los mismos analizamos que son miles de líderes comunales, sindicalistas, estudiantiles, indígenas, y precisamente este tipo de casos son los primero que han quedado archivados y no por un error sino al contrario, los gobernantes que exigen a los directores de la fiscalía que estos archivos sean guardados, perdidos y en muchos casos quemados.
Compañer@s no nos de miedo pensarnos una verdadera universidad, no nos dejemos opacar por los interés de unos cuantos que pretenden que nuestra universidad sea solo para unos sino al contrario seguir construyendo, craneándonos y combatiendo con el pensamiento y la expresión a aquellas personas que tratan de matar cualquier manifestación la cual nos beneficia a todos como pueblo.
